lunes, 13 de junio de 2011

Confieso que he vivido

Asi titula el libro que tengo entre las manos, es el libro de memorias de Pablo Neruda, que fueron publicadas póstumamente. De Neruda puedo decir que me enamora su poesía, quien no ha leido uno de los poemas de "Veinte poemas de amor y una canción desesperada", al menos creo que todos, aún asi sea un verso...

Me gustas cuando callas porque estas como ausente
y me oyes desde lejos y mi voz no te toca
parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca ....

El libro "Confieso que he vivido" no sólo describe al poeta y sus poesías, si no más bien al niño, al joven  y al Hombre, Ricardo Eliecer Neftalí Reyes, más conocido con el seudónimo de Pablo Neruda, las primeras páginas del libro se condensa en una infancia llena de personajes,del amor a la familia y los primero poemas, porque uno antes de poeta es humano, y nadie absolutamente nadie nace sabiendo, así mi querido Neruda tuvo que pasar por  las vicisitudes de la vida, como las pérdidas, como la timidez (una extraña condición del alma tal como lo cita él), en todo esos entramados que nos depara la vida para aprender. El gran poeta tuvo amores esos llenos de intensidad, pero también  experimento conflictos estuvo presente en la Guerra Civil española, y se comprometió con la política por las causas que el creía, esto lo lleva a  viajar  y conocer personalidades de todo el mundo, es decir a tener amistades y a su vez aprender de ellos, entre ellos destaca su amistad con escritores y artistas.  Leer este libro es como escucharlo hablar, y contarnos su vida, es como si te mirara de frente y con palabras suaves y mirada despierta te contara un cuento, un poco mas largo y más intimo.

El libro inicia así:

Estas memorias o recuerdos son intermitentes y a ratos olvidadizos porque así precisamente es la vida. La interminencia del sueño nos permite sostener los días de trabajo.
Muchos de mis recuerdos se han desdibujado al evocarlos, han detenido en polvo como un cristal irremediablemente herido.

Las memorias del memorialista no son las memorias del poeta. Aquél vivió tal vez menos, pero fotografió mucho más y nos recrea con la pulcritud de los detalles. Éste nos entrega una galería de fantasmas sacudidos por el fuego y la sombra de su época.

Tal véz no viví en mi mismo;  tal vez viví la vida de los otros.

De cuando he dejado escrito en estas páginas se desprenderán siempre como en las arboledas de otoño y como en el tiempo de las viñas...las hojas amrillas que van a morir y las uvas que revivirán en el vino sagrado.

Mi vida es una vida hecha de todas las vidas: las vidas del poeta.





el video es de la película IL POSTINO, una de mis películas favoritas

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